lunes, 28 de enero de 2013

REFLEXIONES DE UN VIGILANTE SOBRE LA SITUACIÓN ACTUAL

Hace casi 23 años que empecé mi andadura laboral, y en esa época se ganaba dinero aunque en realidad esta profesión nunca estuvo bien pagada porque se realizaban horas extras no las que uno quería, si no las que te imponía la empresa obligándote a trabajar los días de descanso, mediante llamadas telefónicas que te hacia la empresa por mediación de los inspectores en horas intempestivas despertando a la familia en altas horas de la noche, porque algún listillo o pelota de la empresa quería librar un día en concreto que casi siempre caía en fin de semana e ir a trabajar de portero de discoteca o algún otro menester por que en aquel entonces no existían los teléfonos móviles de hoy en día.
 En aquella época éramos considerados como agentes de la autoridad, teniendo legalmente el carácter del mismo, hasta que un buen o mal día según se mire y por acto de algo sobrenatural, por no decir algo más grueso y a partir de ese día allá por el año1992 nos retiraron dicha condición y es ahí cuando empezaron los problemas en cuanto a la manera de trabajar, ya que la prensa extendió dicha noticia como un reguero de pólvora por toda la sociedad española, sobre todo por la sociedad que no quería ser vigilada por aquellos agentes que sin ser policías tenían sus atribuciones, ya se sabe que en esa época las pruebas de acceso a la profesión eran bastante asequibles, sobre todo para aquellos familiares de Guardias Civiles y Policías Nacionales los cuales al ser rechazados una y otra vez en las diferentes pruebas de acceso, ya que antiguamente se ganaba mas dinero que en la seguridad publica, desde la retirada de la mencionada condición de autoridad ha habido episodios de perdidas de vidas humanas en acto de servicio, por que al perder dicha condición se convirtió en muchos casos en casi un deporte nacional el agredir al Vigilante de Seguridad , y en muchos casos terminar en muerte de los mismos, no informados por la prensa ese mismo periodismo que se encargo hasta la saciedad en menospreciar esta profesión tan digna como necesaria hoy en día porque al parecer nos quieren situar en todo tipo de servicios públicos y tan siquiera en aquellos que época pasada no nos imaginábamos , ejemplo vigilancia en Centros Penitenciarios, pero eso si no cobrando lo que cobra un policía en la actualidad, ni que decir de sus condiciones sobre todo en lo que se refiere a la AUTORIDAD.
Espero que en el futuro esto se arregle poco a poco aunque no lo creo, ya que hoy en día la mayoría del dinero negro entre otros orígenes proceden de empresas de seguridad según divulga amplio sector de la prensa, si no que se lo digan al Sr. Barcenas u otros anteriores que los ha habido y que posiblemente no han salido a la luz pública, es decir cuando el río suena es porque agua lleva, entonces que me expliquen a mi porque se vio en la tele una furgoneta de color blanco y que estaba rotulados empresa de destrucción de documentación confidencial saliendo de la sede del Partido Popular ¿ estarán allí los recibos de los famosos sobresueldos presuntos de los dirigentes del P.P.? Ya veremos el tiempo lo dirá…
 Mientras el sector de la Seguridad Privada agoniza con unos salarios totalmente en desacordes con las tareas de seguridad y vigilancia las cuales sirven o son para evitar cualquier daño, expolio de las instalaciones de nuestros clientes o personas que allí se encuentran, por esta razón senos tendría que tener en mas consideración a la hora de facilitarnos condiciones de protección legal , como la condición del carácter de agente de la autoridad, organizativas como la de intercambiar información con el resto de los cuerpos policiales del Estado, y socioeconómicas como la de un justa remuneración que hoy por hoy es totalmente inconstitucional que como indica el Art. 35 de nuestra Constitución debería de satisfacer las necesidades del trabajador y las de su familia y no lo hace, por eso insto a todas las representaciones sindicales a que aúnan esfuerzos y ninguna se desmarque a favor de la patronal porque hasta los mismísimos dirigentes sindicales se hundirán al final en el barro con todos los trabajadores, y entonces no habrán excusas, espero que lo que he escrito sirva de reflexión a todos los compañeros que estén o no estén de servicio y sobre todo a los dirigentes sindicales que son el garante de nuestra defensa de nuestros intereses y que en ellos depositamos nuestro cuando toca depositarlo…